Usemos la imaginación!!!

Lo mejor para evadir el frío atroz que nos cala los huesos es pensar que no lo sentimos y que los tiritones de quienes nos rodean no es más que producto de nuestra imaginación. Gracias a Dios no estudié educación física por que el colega que hace clase en el patio con los labios amoratados no luce nada de bien. Ojalá llegue luego septiembre con sus flores, colores y cuecas, mientras tanto sueñen con estar en esta playa sudando mientras algún nativo bronceado y bien dotado las abanica con una gran hoja de palmera...

Los políticos son un asco...

Uff!!! después de ver la manera descarada en que algunos políticos de nuestro país se dieron vuelta frente a la votación de la LGE, no me queda más que considerar a los pertenecientes a esa especie como una muestra viviente de la corrupción. El día que dejen de percibir sueldos millonarios y la infinidad de beneficios de los cuales gozan sólo por pertenecer al senado o a la cámara de diputados, podremos ver quienes son los que tienen realmente vocación de servicio y siguen en el puesto. Las elecciones, un mero trámite para ver si siguen robando los mismos o ahora les toca robar a otros. El gobierno indulgente, mano blanda oídos sordos...

¡Creo que prefiero la lluvia!

¿No me reconocen?, soy yo!!!
Alegué por la lluvia que no paraba y la verdad es que ahora prefiero mojarme a congelarme. El sol no colabora en nada, salgo absolutamente forrada en ropa cada mañana y el colegio es un iglú. Espero que lleguen luego las vacaciones de invierno o me veré obligada a perder unos cuantos dedos producto del congelamiento.

¡Me encanta el viernes...!

Aunque no tenga nada especial programado, el viernes es mi día favorito. Me gusta mi trabajo y disfruto con él pero pensar que se acercan dos días en que no escucharé la melodía que cada mañana me despierta y puedo quedarme en cama hasta que quiera, ya es un super panorama ¿o no?. Entonces contágiense de mi alegría y sonrían porque ya es "viernes"...

Hay que saber perder...

La mayoría de mis colegas son colocolinos, y hoy se daban el pésame unos a otros y culpaban de la derrota al árbitro, al pelado Acosta, al aire marino y a cuanta cosa pudiera justificar la contundente derrota. Me gusta el fútbol, mi marido y su familia son albos de corazón y hasta comencé a creerme alba también, pero con el partido de ayer sentí una alegría que no pude demostrar abiertamente (soy, considerada) y es que soy viñamarina e imaginé a mis amigos, vecinos y compañeros de liceo saltando y gritando de alegría, definitivamente no soy alba, la verdad es que de ningún color, el fútbol es entretenido pero de ahí a sufrir por él... En fin está bien que alguna vez le toque bailar con la linda a otro, así se aprende a saborear la derrota y asumir que el rival fue "mejor"...

Hoy había preemergencia...

Creo que la mayoría de los santiaguinos han olvidado, que tras la gruesa capa de smog que a diario nos agobia, hay una cordillera imponente. Seamos positivos y deseemos con fuerza que alguna día, las autoridades solucionarán este problema en forma definitiva. Mientras tanto yo viajo a la costa cada vez que puedo y respiro mas de lo acostumbrado a ver si mis pulmones hacen memoria y recuerdan lo que era "aire"...

Espíritu de servicio...

Suelo ser bastante sentimental, y reconozco sin reparos, que ayer domingo lloré mucho viendo por televisión los funerales del director general de carabineros fallecido en el extranjero. Conozco varios carabineros que han asegurado que la institución tuvo un perfil más humano durante su gestión y se les trato con respeto y consideración. pero lo que más me emocionó fue escuchar las palabras de su hijo mayor, apelando a los senadores, diputados y autoridades a que también sean "del pueblo", sin duda ese llamado no puede haberles resultado ajeno. Si todos los que ejercen cargos públicos tuvieran la vocación de servicio necesaria, este país marcharía mucho mejor. En fin prefiero ser optimista y soñar con que algunas de nuestras autoridades escuchen el llamado de su conciencia y velen por los intereses de todos los chilenos... Amén.